IMpro visando





Sí loco.
Para el amigo Nicolás Guerrero, this time.
Sale el rap escrito
yo te canto, yo te cuento
yo vine a este mundo a contar
a cortar, a cargar, a copar
                   y a coparticipar
                         porque soy de la provincia.
Soy de provincia, soy de capital
soy bueno pa la rima
yo te mando al hospital
qué te pasa estás zarpado
tenes problema mental?
qué te pasa estás drogado y ya no te acordás
que te pasa con las rimas
que te pasa donde estás
me escuchàs?
qué flashiás, macho, contá

mucho matute con gorra en la calle
mucho sí señor no señor
en casa sí teníamos televisor
y había una heladera también
qué sé yo:
pisoteaba el polvo de aquellos teros,
me quemé una vez,
llevando un bidón con hielo,
profané en aquellos aires, me afané,
busqué un poco y alguito encontré
es así, sí señor, no se olvide
yo ya no soy un pibe, sì señor.
Oh señor
hoy cantaba un ciego en el vagón
subió con un güiro hecho con un caño de plástico
y cantó una canción que decía
que cristo volvería
y que entonces ese día
las trompetas sonarían.

Era un tema de cumbia.
Yo venía escuchando al negro rada
en el auricular
y me los saqué para escuchar,
sí señor,
el tipo dijo que no se avergonzaba de adorar a cristo
y está bien qué vas a hacer
vergüenza es robar y no llevar plata a casa
y el tipo se pone las pilas, se hizo el güiro.
canta una canción y
si se quiere
tambièn te está invitando a pensar
y no le vas a pedir que se haga materialista histórico
eso es de cristiano salvajón y brain washed.

cristiano salvajón, inorante y arjentino
así sos vos, así soy yo, así son los asesinos.
cristiano salvajón, radicalista y arjentino, sí señor:
mucho matute de esos
de gorra
por la calle
mucho sí señor, no señor
y plegarias elevadas en secreto en la bóveda auricular
subido a un carro grande que te lleva a laburar
por el camino de tierra o por el camino del real
por esa avenida caminamos sin hablar
Avenida Rivadavia
que no hay una sola,
pero nada más hay una
que es la más larga del mundo.
En otro lado
por ejemplo VillaReginaRíoNegro
la avenida es ancha y asfaltada
larga también pero no tanto
se estiende desde la ruta 22
donde está el auto estóp
hasta donde están construyendo una sede de una universidad,
hasta lo de Vertúa que hay una chimenea, de esas viejas
de ladrillo. Altísima me parece más alta que la que hay por ahí cerca de la calle avellaneda
                                                                            (meparece que se ve desde Gualeguaychù)
pero seguro así me parece porque la miré más que nada cuando yo era chico:
antes de que ahí
a una cuadra
hicieran la "autovía" o no sé cómo le llaman
la ruta a cuatro manos,
la ruta veintidós,
antes incluso (mirá lo que te digo)
antes de que un intendente arquitecto, un intendente más bien escenógrafo, quizás
haya aprovechado todo el terreno del ferrocarril para hacer un parque
que dice que lo fertilizaban con mierda humana, el césped.
Antes de eso ya trajinaba por ahí, así que...
en fín.
La avenida rivadavia:
por donde ibamos
a dar la vuelta al perro
                                (esto dicho como recitando algo aburrido, acentuando: a dár la vuél-tálperro)
que así le dicen porque es la última y después se va a dormir (dice mi viejo)
y capáz este extraño ritual, que he tenido la oportunidad de observar también en localidades como Fiske Menuko o Chivilcoy, provenga de la costumbre de esperar a que llegue el tren, y las niñas con sus vestidos después de misa, "la banda del Regimiento que toca cumbias". Y es probable que como hoy acaso haya sido entonces el ritual
de apropicuarse hacia el centro para ver y hacerse ver,
y medir la distancia de todos respecto al centro:
lejos, lejos todos: pueblerinos,
ja!
campiranos, pajueranos, campesinos,
soñando con tunear el fiat mil quinientos
o con tunear el chevy
o con salir volando de las bardas con el chevy
hacia un viaje final, ultimatorio, de ci si vo,
o
vaya a saber con qué sueñan
no sé con qué habré soñado yo
cuando paseaba por ahí con Marín
y con la vange y alexis en el auto de Marín
o con el auto de mamá y papá con Gerardo
y Natalí o Sandra,

con Gerardo
y unas amigas de Gerardo
que una vez
nos fuimos al río pero era invierno
y una, la tetona,
conmigo no quería
y la otra,
la morocha,
no me avivé de cogermelá,
qué va a ser
a veces no sale:
si no le gusta, es fácil:
usted agarra de acá,
puede seleccionar el nombre Daniel Durand
y buscarlo en Google.
Hacer lo propio con Jorge Teillier
o con Las memorias de un provinciano
de Mastronardi.

Yo la voy cortando porque hace frío
y se me congelan los deditos al teclear,
yo la voy cortando pero otro día volveré
aunque no lo esperen ni lo vayan a creer
volveré para cantar porque es el cuento
mi oficio, mi tarea, mi pasión
mi berretín si se quiere
pero con el corazón,
yo les canto con el teclado:
lo que sale no es canción,
lo que sale es grabación
de lucecitas electrónicas
y... no sé:
eso que anotan la placa madre y el microprocesador
en el disco rígido
o en algún servidor perdido
de alguna región del mundo.